Conducir una moto en invierno es una aventura térmica. Nos podemos encontrar de todo: lluvia, viento, frío intenso, nieve… Elegir la ropa adecuada es clave para no acabar con un resfriado de aúpa. Si quiere conocer de primera mano cómo vestirse para ir en moto en invierno y cómo elegir las prendas que más se ajusten a sus necesidades, este es el artículo que estaba buscando.
Elegir la ropa de moto en invierno
La recomendación general a la hora de vestirse para ir en moto en invierno es utilizar varias capas. Esta técnica permite conservar el calor durante el trayecto, ya se trate de un desplazamiento corto en ciudad o de rutas largas por carretera u off-road. Aquí le contamos en qué consiste esta técnica de cubrirse por capas y qué tipo de prendas comprar para ir como un guante.
Las capas: ¿cuántas y cuáles?
Lo ideal en cuanto a la ropa de moto en invierno es usar 3 capas: una capa interior para conservar mejor el calor, un jersey o forro polar y una chaqueta de moto que nos cubra y proteja en caso de caída.
Primera capa: camiseta y mallas térmicas
Para que el frío no nos cale los huesos, es necesario contar con una primera capa térmica eficaz y ligera. Escoja camisetas y mallas térmicas de materiales sintéticos (poliéster, poliamidas), o de tejidos naturales como la lana merina, que sean transpirables, se ajusten bien al cuerpo y permitan retener el calor y evacuar la humedad (sudor). No se rasque el bolsillo e invierta en una primera capa térmica de calidad. Las camisetas térmicas de montaña, que reúnen todos los requisitos mencionados previamente, se venden por un precio medio de 50 €.
Segunda capa: forro polar
Cuando el invierno aprieta, hace falta contar con una segunda capa para no pasar frío. Recomendamos usar un forro polar, hecho de materiales sintéticos, para cubrir el torso completo y el cuello. Los ideales son los forros polares de montaña, que se pueden encontrar en tiendas especializadas de deporte a partir de 20 €.
Si hace mucho frío, los abrigos ligeros de plumas son ideales como capa intermedia entre el forro y la chaqueta de moto. Además, los nuevos modelos son tan ligeros y fáciles de doblar que no tendrá la típica sensación de opresión.
Tercera capa: chaqueta de moto y pantalones de moto
La última capa es la más importante. No solo en términos de frío, sino también de seguridad, tanto en invierno como en verano. Conviene estar equipado con chaquetas y pantalones de moto de calidad que lleven protecciones en codos, hombros, espalda, rodillas y cadera.
Una buena chaqueta de moto suele rondar los 200 € (llegando incluso a superar la barrera de las cuatro cifras), mientras que un pantalón de moto oscila entre los 100-300 € aproximadamente. En ambos casos, se trata de una inversión que vale la pena, puesto que son prendas que nos servirán para cualquier temporada y que nos protegerán también en caso de lluvia.
Y como extra para proteger sus extremidades del viento helado, piense incluir un sotocasco polar (35-60 €), de preferencia ligero para evitar incomodidades con el casco, unos guantes acolchados e impermeables (a partir de 40 €) e incluso calefactables, y un par de botas antideslizantes y con aislamiento térmico que encontrará en todo tipo de estilos y precios diversos.